Modificando hitos fronterizos con Portugal

En un post anterior conté la alucinante historia por la cual estuvimos a punto de conquistar media hectárea a Portugal, sin proponérnoslo.

No sean malpensados.

Bien es cierto que al final no se llegó a materializar porque, por un lado, los portugueses nos avisaron de tal circunstancia y, por otro, porque el modificado técnico de las obras para evitarlo también nos interesaba.

La frontera entre España y Portugal en la zona extremeña se verifica, en gran parte de la misma, mediante ríos, con lo que las posibles disputas territoriales se minimizan.

Esto que es cierto en la mayoría de los casos, tiene en Extremadura el ejemplo de Olivenza, localidad española que sigue siendo reclamada por Portugal.

En el caso de que no exista cauce de río, la frontera se materializa mediante unos hitos, cuya colocación se realiza de mutuo acuerdo entre ambas naciones.

El caso que voy a relatar sucedió cuando estábamos acondicionando la carretera EX-107, de Badajoz a Portugal por Villanueva del Fresno, en el tramo entre Alconchel y Portugal.

En el siguiente mapa podemos ver el trazado de la carretera entre Villanueva del Fresno y la frontera, que se puede ver a la izquierda.

Como ya he dicho, no existe cauce que haga de frontera y ésta se concreta con los cerramientos de las parcelas colindantes con la frontera.

Sorprendentemente, pues no suele ser el caso, la carretera del lado de Portugal ya estaba ensanchada y acondicionada.

En esta foto área de 2006 así lo podemos apreciar.

A ambos lados de la carretera, y muy cerca de ella, se encontraban un par de hitos de granito, con los escudos nacionales respectivos, que marcaban la alineación de la frontera.

Así el hito, en su cara hacia España, presentaba el siguiente aspecto: 

Un primer plano del escudo es el siguiente:

Como curiosidad, en la foto puede apreciarse un error en el hito, concretamente en la letra ñ de España.

Y en su cara hacia Portugal, tenía el escudo de esa nación.

Cuando los portugueses ensancharon su carretera no llegaron realmente hasta la frontera, sino que se quedaron unos metros antes, por lo que los hitos no fueron problema ni necesitaron moverlos.

Sin embargo, cuando acondicionamos la carretera, tuvimos que enlazar, no sólo en planta, sino también en alzado, como no podía ser de otra forma, y nos encontramos que los hitos quedaban lindando con la nueva plataforma de la carretera, suponiendo un peligro para el tráfico, pues ni poniendo una bionda evitábamos el posible impacto con ellos.

En las siguientes fotos podemos ver dónde estaban situados cuando estábamos extendiendo la zahorra artificial.

El hito izquierdo en el sentido a Portugal.

Y el derecho.

Se imponía, por tanto, desplazar los hitos. Pero, ¿dónde?

Para ello nos pusimos en contacto con el Instituto das Estradas de Portugal, en su sede de Évora y acordamos, previo levantamiento topográfico de la frontera en la zona, las coordenadas de la nueva situación de los hitos.

Una vez determinada la posición nos pusimos manos a la obra para moverlos.

En la siguiente foto podemos ver la excavación del hito izquierdo.

El momento del traslado a la nueva posición.

El hito izquierdo en su nueva posición.

El proceso se repitió con el hito derecho, del que vemos el traslado en la siguiente foto.

Y la colocación en su lugar definitivo.

La situación definitiva de los hitos podemos verla en la siguiente foto aérea actual con los hitos en su situación definitiva y la frontera marcada por la línea verde.

Como puede apreciarse, la diferente distancia de los hitos a la carretera venía determinada por las expropiaciones que se realizaron, como no podía ser de otra forma, en la zona española, de ahí que el hito izquierdo sigue quedando cerca de la carretera, pero a una distancia segura.

Y así fue como resolvimos una problemática tan sensible como la de la frontera y su delimitación mediante hitos.

Por cierto, el día que cambiamos los hitos fue el 19 de noviembre de 2007.